El 21 de julio, Jito Labs presentó BAM (Block Assembly Marketplace) para resolver desafíos persistentes en los ecosistemas blockchain, como el ordenamiento injusto de transacciones y el MEV (Valor Máximo Extraíble, Maximum Extractable Value). Esta iniciativa marca el inicio de un nuevo paradigma en la gestión de transacciones en Solana. BAM busca ofrecer un flujo de ejecución de transacciones más transparente y controlable en Solana, manteniendo un alto rendimiento, al tiempo que incorpora protección de la privacidad, ordenamiento verificable y programabilidad a nivel de aplicación. Así, crea un mercado de ejecución en cadena eficiente y equitativo.
Este artículo examina la arquitectura técnica de BAM, sus casos de uso, el impacto en el ecosistema y la hoja de ruta de desarrollo, con el objetivo de ayudar a los lectores a comprender la relevancia de esta infraestructura esencial.
En las blockchains, el orden de las transacciones se asigna tradicionalmente a los productores de bloques (en Solana, los nodos Líder). Este mecanismo facilita que ciertos nodos obtengan beneficios priorizando, reordenando o intercalando transacciones (lo que se conoce como “front-running” o “operativa anticipada”), un conjunto de prácticas denominadas MEV. Aunque el término significa “extracción de valor”, en realidad este proceso suele perjudicar tanto a los usuarios como a las dApps, puesto que reduce la equidad y degrada la experiencia de usuario.
El problema es especialmente relevante en blockchains que emplean libros de órdenes centralizados (CLOBs) para la negociación, donde la ejecución de órdenes incide directamente en los resultados de operaciones. Si no existe un mecanismo de ordenación transparente y controlable, se perjudica a los usuarios y se pueden ver erosionados los ingresos del propio protocolo.
Ilustración: Usuario víctima de un “ataque sándwich”
El ecosistema de Ethereum ha desarrollado el modelo Proposer-Builder Separation (PBS) para crear mercados de construcción de bloques, separando la capacidad de ordenar transacciones respecto a los proponentes de bloques para mitigar el MEV. Por su parte, Solana, enfocada en el rendimiento, apuesta por una solución más integrada y nativa con BAM: un mercado de ordenación completamente integrado, desde el hardware hasta el protocolo base.
BAM se fundamenta en varios componentes principales:
El flujo de transacciones funciona de la siguiente forma:
La gran innovación de BAM consiste en la introducción del mercado de ordenación, la gestión de la privacidad y la verificación en cadena: tres factores que incrementan la equidad y la programabilidad sin alterar el consenso básico de Solana.
BAM no solo optimiza el orden de transacciones, sino que también habilita nuevos casos de uso:
Estas funciones mejoran la experiencia del usuario y aportan a los operadores institucionales las garantías de cumplimiento y ejecución que requieren, lo que puede convertir a Solana en un destino atractivo para capital institucional.
El despliegue de BAM consolida aún más el rol de la Organización Autónoma Descentralizada (DAO) Jito en la infraestructura MEV de Solana. Según Jito, a partir de ahora todas las comisiones de protocolo generadas por BAM y el Jito Block Engine se ingresarán en el tesoro de Jito DAO.
La inclusión de plugins introduce un nuevo mecanismo de obtención de valor: los desarrolladores pueden cobrar tasas por el uso de plugins, mientras que los Nodos BAM y los Validadores reciben una parte proporcional de los ingresos por servicios de ordenación y ejecución.
Jito Labs continuará ocupándose del mantenimiento técnico de BAM, aunque la gobernanza recaerá en la comunidad DAO, lo que garantiza la neutralidad y fomenta el desarrollo descentralizado.
Hoja de ruta y socios del ecosistema
El proceso de despliegue de BAM se articulará en varias etapas:
Los socios iniciales incluyen proyectos clave del ecosistema Solana, como Drift, Pyth y DFlow. Se prevé la incorporación futura de otros proyectos DeFi, oráculos y plataformas de trading.
La aportación de BAM va más allá de mejorar el rendimiento o la equidad: transfiere los “derechos de ordenación” de la capa de protocolo a los desarrolladores y usuarios. Esto permite que el trading en cadena se acerque al determinismo, la privacidad y la responsabilidad de los mercados financieros convencionales, sentando así las bases para la DeFi 2.0.
No obstante, la adopción de BAM plantea varios retos: la dependencia de la seguridad del TEE, la complejidad en el desarrollo de plugins y la dificultad de equilibrar descentralización y eficiencia siguen siendo cuestiones abiertas que requieren una evaluación constante. Si BAM consigue finalmente que Solana predomine en el sector es una incógnita aún por resolver.